La peor estrategia para la pérdida de peso son las dietas
Cuantos de nosotros, nos hemos encontrado alguna vez frente al espejo pensando: quiero bajar de peso. La mejor estrategia conocida, es buscar por todos lados la dieta perfecta, la pastilla que esta de moda o la receta que me recomendó la prima de mi amigo. De cualquier forma, el único objetivo en la mente es bajar esos kilitos extras y ya. El resultado final, es regresar al punto de inicio, frente al mismo espejo pensando: una vez más la dieta no funciono. El principal error es que repetimos la misma estrategia, buscando conseguir resultados distintos. Pero, las dietas no funcionan a largo plazo simple y sencillamente: porque son obsoletas (punto).
Si tú has estado en esta situación constantemente, y estas buscando una solución definitiva, la mejor opción no es un cambio de dieta, la única solución es un cambio de mente. ¿Quieres saber como lograrlo?
Si haces planes para un año, siembra arroz; si los haces para dos lustros, planta árboles; si los haces para toda la vida, educa una persona
Nuestra vida en estos días es demasiado dinámica, estamos en constante movimiento, vivimos dentro de un mundo con responsabilidades laborales, educativas, compromisos sociales, obligaciones familiares, es demasiado complicado contar calorías y gramos para lograr cumplir la dieta y además cumplir con todo lo demás. Es demasiado confuso y agotador, por lo que generalmente abortamos la misión «quiero estar en forma».
Bajar de peso es un problema grave al que se enfrentan miles de personas alrededor del mundo. Las consecuencias metabólicas como la aparición de enfermedades crónicas (diabetes, hipertensión, enfermedades cardiovasculares, etc.) son evidentes. Por lo que mantener un peso adecuado se ha reportado con una prioridad de acción inmediata.
Las dietas de hoy en día, son anticuadas porque no se adaptan a las circunstancias actuales y por eso NO LAS HACEMOS. Desde hace varios años el esquema manejado no ha evolucionado a la par que la vida de las personas lo ha hecho. Hoy en día, vivimos en un mundo que va de prisa, la productividad se ha triplicado y las demandas del mundo actual conllevan exigencias que nos obligan a desplazar completamente nuestra alimentación.
Lo que se necesita es solucionar el problema desde la raíz, y esto solo se consigue construyendo desde cero nuevos hábitos de vida. El objetivo de este artículo es explicarte porque, el cambio de hábitos es la mejor estrategia para la pérdida y mantenimiento de peso.
Los errores de una dieta típica
Una típica dieta es aquella que te indica que comer cada día, tienes un menú con alimentos fijos por día y generalmente cuentan con porciones definidas. El siguiente ejemplo representa algunas dietas comúnmente encontradas:
Desayuno | Comida | Cena | |
Lunes | 1 fruta + 200ml de leche + 120g de pan | 125g de pechuga a la plancha + porción de verduras | Queso descremado + Bebida sin leche |
Martes | Yogur desnatado + 60g de avena | 125g de salmón ahumado + porción de verduras | 200g de arroz al vapor + poción de verduras |
Miércoles | 1 huevo duro + té | 125gr de carne asada + ½ porción de aguacate | Sopa de verduras |
Jueves | 1 fruta + 200ml de leche + 120g de pan | 125g de pechuga a la plancha + porción de verduras | 1 lata de atún con 40g de pan integral |
Viernes | desnatado + 60g de avena | 125g de salmón ahumado + porción de verduras | Queso descremado + Bebida sin leche |
Sábado | 1 fruta + 200ml de leche + 120g de pan | 125gr de carne asada + ½ porción de aguacate | Sopa de verduras |
Domingo | 1 taza de chocolate con leche + sándwich de pechuga de pavo | 125g de pechuga a la plancha + porción de verduras | 200g de arroz al vapor + poción de verduras |
Esta dieta comete los siguientes errores:
- No es personal, porque cada quien tiene necesidades energéticas distintas y una rutina diaria diferente. Se te dificultaría llevarlo al contexto individual.
- Te limita, porque las opciones que te indica para comer son cuadradas
- No toma en cuenta tus gustos y preferencias, de tal modo que tienes poca adherencia
- Se enfoca en el resultado y no en el proceso de cambio. No genera hábitos
- Las porciones están mal diseñadas. Son muy estrictas e imposibles de seguir
- El efecto es temporal. La pérdida de peso solo se logra durante la dieta, una vez que regresas a tu alimentación “normal” retomas también el peso inicial o incluso aumentas de peso (efecto rebote)
Las dietas son innecesarias, no son permanentes y es una estrategia inútil cuando se busca mantener los resultados a largo plazo.
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Está claro que el principal motivo para tener un peso adecuado, es la mejora de la salud, la calidad de vida, y la prevención de enfermedades, pero más allá de eso, existen motivos personales que impulsan a bajar de peso o por el contrario motivos que generan resistencia e impiden hacerlo. Seguir una dieta no te hará descubrir la razón que te impulsa o te detiene, y mucho menos lograra cambiar estos motivos, lo que te estancara en la misma situación una y otra vez.
Además de bajar de peso, el gran reto para todos es mantener un peso adecuado. Las dietas pueden tener un efecto superficial a corto plazo, pero este resultado se pierde con el tiempo porque no actúan en niveles profundos de tu mente; y entonces recuperas los kilos perdidos y pierdes solo las ganas de volverlo a intentar.
Un cambio de hábitos es un cambio de mente
Si te fijas, la mayoría de nuestras acciones diarias son controladas por hábitos. Nuestro inconsciente dirige la mayoría de nuestras decisiones. El cambiar y/o mejorar tus hábitos de alimentación, logra que bajes de peso, que lo mantengas, y además que aprendas a luchar con ese pensamiento que te impedía hacerlo. Por lo tanto además de controlar el peso, lograrás también un crecimiento personal y una transformación en tu vida.
Recuerda que elegir que comer es una decisión poderosa, que tiene repercusión en muchas áreas de la vida. Una dieta restringe ese poder de decisión, no te enseña a comer; porque solo trabaja a un nivel superficial en donde el cambio permanente no existe. Por eso cambiar un hábito tiene mucho más poder que solo seguir una dieta.
Si buscas perder peso y mantenerlo, la mejor estrategia es: cambiar tus hábitos de alimentación.
De hecho esta comprobado que si incorporas un solo hábito saludable a tu rutina, verás resultados en poco tiempo los cuales perduraran a través del tiempo. Un estudio publicado respalda este hecho (1). Los resultados del estudio muestran que el estilo de vida se asocia de forma independientemente con el aumento de peso a largo plazo, incluyendo el consumo de determinados alimentos y bebidas azucaradas, falta de actividad física, consumo de alcohol, ver televisión, y fumar.
Se encontró que el aumento de peso promedio a largo plazo es gradual , aproximadamente 0,8 kg por año, pero este modesto incremento de peso, acumulado con el tiempo, tienen implicaciones para la aparición de enfermedades metabólicas como, la diabetes, la enfermedad cardiovascular y cáncer.Por el contrario, los cambios en el estilo de vida, como mejorar la alimentación y la actividad física representan grandes diferencias para prevenir el aumento de peso.
Si quieres saber como dar el primer paso para cambiar tu vida, lee Los 6 pasos para el cambio de hábitos. Recuerda que el esfuerzo invertido para cambiar tus hábitos, logrará resultados permanentes.
Comparte este artículo con las personas que necesiten ayuda para lograr un cambio en su vida. Para cualquier duda o comentario no dudes en contactarme .
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